La búsqueda incesante de aprobación
Estando en un grupo como participante, me di cuenta que aún andaba buscando aprobación de la gente esperando que me miraran, me hablaran, me tuvieran en cuenta, me incluyeran, con el sufrimiento que eso siempre ha conllevado especialmente cuando no he encontrado esa atención aprobativa por parte de los demás.
Entonces experimenté una comprensión: “Si estoy aquí, es que la vida me aprobó, sino, no estaría!!”
Se hizo la luz en mi panorámica y modo de percibir este tipo de situación… Reflexioné sobre ello: “Si estoy viva, es que la vida me aprobó, sino no hubiera nacido o ya hubiera muerto!”.
Me sentí aprobada, mi mirada fue más allá de pretender que alguien en concreto o un grupo de personas me vean, fue hacia aquello que nos aprobó a todos los que estamos y estuvimos, la VIDA! Si ella me aprobó y me sigue aprobando, no hace falta más aprobación.
Luego mi reflexión se extendió hacia mi madre a la que algunos familiares -y yo misma en otros tiempos- han reprobado. Se extendió hacia todas esas personas o tipo de persona que me cuesta aceptar. Entendí que yo no soy nadie para juzgar, que es cosa de la vida que estén o no estén.
Ponerse por encima de la vida
Me acordé de una frase de mi pareja, Josema Torres, cuando le dijo a alguien “Te pones por encima de la vida”. Me resonó aún más, tomó todo su sentido, ¡cuántas veces me he puesto por encima de la vida!
Continué reflexionando y pensé “La vida nos aprueba cuando nacemos y crecemos. Luego, según el estilo de vida, los hábitos, la manera de hacer y funcionar que tengamos, nos sigue aprobando o nos desaprueba con emociones y comportamientos tóxicos, malas experiencias, enfermedades, muerte…” (Claro que también considero que pueden haber enfermedades al margen de todo ello, pero en situación de abundancia tal vez sean las menos o aparezcan en edad avanzada).
Situarme desde ese punto, que la vida me aprobó, me da para empezar una relajaciónnnnnn graaaandeee, y una responsabilidad igual de grande sabiendo que está en mi mano, en una importantísima parte, seguir haciendo lo que corresponde para seguir siendo aprobada!
Mª Rosa Parés Giralt