Ordenar puede ayudar a nivel individual y de convivencia

Ordenar el entorno en el que vivimos, trabajamos o estamos, nos facilita un modo de estar y sentir más grato, claro, contenedor y reconfortador que nos puede facilitar la convivencia.
Cuidarse es fácil y necesario

Cuidarse es mucho más fácil de lo que parece, no hacen falta grandes inversiones para tener un estilo de vida sano que nos aporte salud a todos los niveles.
La frustración es natural, forma parte de los mecanismos de adaptación

¿Qué hace que queramos huir de la frustración? ¿Has pensado alguna vez que frustrarse forma parte de nuestra respuestas de adaptación al entorno?
La práctica de ayuno intermitente

La práctica de ayuno intermitente, más allá de ser una moda o un ritual, es una pauta de alimentación con toda una serie de beneficios y una forma de desarrollar la capacidad de voluntad y elección frente a la actitud de reacción.
Hazte cargo de tus miserias y tus glorias

Hazte cargo de tus cosas, de tus impulsos, de lo que pones en tus palabras, en tus acciones.
Lo que hace la vecina, el vecino, es cosa de ella, de él. Lo que haces tú con eso, es cosa tuya.
Las capas de la personalidad

Las personas somos como nueces, a menudo mostramos fuera una cosa y nos sentimos dentro de manera diferente. Tenerlo en cuenta ayuda a juzgar menos y auto-analizarse más.
Ser consecuente, ¿eso qué es?

Ser consecuente puede convertirse en una pista para interactuar, tomar decisiones, realizar acciones, en conexión con la realidad y la respuesta que generamos en el entorno y en nosotr@s mism@s.
Ocúpate de tu necesidad y abandona la queja

Mirar qué hay detrás de nuestras quejas es un buen ejercicio para identificar nuestras necesidades reales y ocuparnos de ellas.
¿Qué ves en la imagen? ¿Estás segura/seguro?

Nuestras vivencias personales, la información que acumulamos, el contagio de estados emocionales, todo ello condiciona el modo en que percibimos las situaciones e interactuamos con el entorno.
El binomio miserable-dios

«Lo humano no me quita un ápice de lo divino, lo divino no me quita un ápice de lo humano.» Una realidad a no perder de vista, especialmente cuando idealizamos a maestros, terapeutas y otras personas que consideramos intachables.